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martes, 28 de abril de 2009

Un error le costó más de lo que imaginaba

El partido entre River y Gimnasia de Jujuy terminó 1 por 0. Pezzutti, en una actitud irresponsable, le tiró un pelotazo a un alcanzapelotas y fue expulsado. "Me dijo algo", contó. Un segundo de furia. Nada más. Al instante siguiente, la conciencia ya remordía a Gastón Pezutti, aunque el arrepentimiento llegó mucho más tarde, ya cuando la ducha había castigado ese lomo que carga 32 pirulos. Gastón Pezzutti no logró controlar las "mil pulsaciones", típico motivo por el que los futbolistas se salen de sus casillas. Sin vueltas, el arquero de Gimnasia de Jujuy le tiró un pelotazo a un alcanzapelotas, por lo que fue justamente expulsado por Gabriel Brazenas. "Así como no me gusta perder, no me gusta que me carguen. Sé que estuve mal, pero me faltaron el respeto y me calenté", señaló Pezzutti.

Por la roja, a los 24 minutos del segundo tiempo, ya con River en ventaja, Héctor Arzubialde tuvo que reemplazar a Diego Mateo por Nereo Fernández, el arquero suplente, cuando su intención era realizar una modificación con tendencia ofensiva, en búsqueda del empate. Por eso mismo, Pezzutti contó que "en el vestuario les ofrecí disculpas al técnico y a mis compañeros, porque aunque mi expulsión no incidió en el resultado, sí modificó los planes que había para lo que restaba del partido". ¿Por qué esa reacción? "Fue desafortunada, pero yo le pedí la pelota con respeto y no me la quiso dar. Y cuando lo hizo, me dijo algo. Por eso me calenté y reaccioné mal. En el momento que vivimos no tengo porqué soportar que alguien de afuera de la cancha haga algo así. El espectáculo lo dan los 22 jugadores y no me gusta que lo quieran manejar los de afuera. Ahora, así como tengo que declarar, espero que lo tenga que hacer el pibe que me cargó, sería lo más justo", hizo su descargo.

Y, ya en escena, el alcanzapelotas también fue castigado por Arzubialde: "Los pibes que alcanzan las pelotas deberían tener menos de 18 años; al menos, en Jujuy piden los documentos de los pibes y acá algunos tenían barba. Igual, Brazenas dirigió bien. Su único error fue no expulsar a Fabbiani por el foul a Cahais". Lo cierto es que el pibe en cuestión sí es menor de 18 años: se llama Leonel Bertello, es defensor de la Octava División y el sábado fue suplente por primera vez en esa categoría. Entonces, que Pezzutti también admita que "nos estamos jugando muchas cosas por eso no soporté lo que pasó", es una explicación más clara.


Me parece que el arquero tiene toda la razón. Un equipo que se viene jugando la permanencia en la primera división visita la cancha de River Plate, uno de los equipos mas importantes del fútbol argentino, con la intención de ganar y salir a buscar el partido. Cuando uno se encuentra en desventaja, siente el apuro de querer ganar el partido, y eso se transforma en nerviosismo. Un chico alcanza pelotas no solo perjudica al arquero al tardar en darle bien la bola, sino que además perjudica a todo un club, cuerpo técnico e hinchada que está detrás intentando salir de la zona de descenso directo. Hace poco hubo una situación similar en el clásico de La Plata, en el cuál las pelotas aparentemente habían "desaparecido". La única manera de mejorar nuestro fútbol en conducta, es mínimamente teniendo respeto por la situación del otro, jugando limpio, sin trampas. Sin árbitros que cobren a favor de un equipo, sin perjudicar con expulsiones insólitas y sin que alcanza pelotas como el del último domingo tarden en entregar la bola cuando su equipo está ganando. En fin, el arquero se encuentra correctamente expulsado y deberá cumplir las fechas correspondientes. ¿Y el alcanza pelotas? Seguramente lo veremos nuevamente cuando River sea local, y ése es el error clave que cometen todos los que dirigen y hacen posible nuestro fútbol. Él también debería ser sancionado.


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